Marta Granés Hoy la ejecución de los sentidos pasa por los aparatos tecnológicos. Pero la tecnología no proporciona experiencias sensitivas directas que inmiscuyan todos los sentidos, y como animales que somos, los necesitamos completamente activados para sentirnos plenamente vivos.
Tener la atención focalizada en lo tecnológico reduce fisiológica y psicológicamente el uso de los sentidos (se reduce al oído y a la vista) y esto restringe la riqueza de la experiencia humana.
Podríamos afirmar que los jóvenes de ahora son la generación más amputada sensitivamente de la historia y, lo peor es que no notan la ausencia puesto que nunca han vivido otra cosa. Lo cualitativo nunca ha estado ahí.
AVISO IMPORTANTE
Nos sumamos a las medidas de prevención de contagio de la Covid-19 y hasta nuevo aviso ofreceremos nuestras actividades en formato online y nuestro centro permanecerá cerrado.
El equipo de CETR seguiremos teletrabajando y podéis contactar con nosotros en el correo electrónico jm.bobadilla@cetr.net