Premio Nobel de Economía
Project Syndicate 1-Febrero-2018
He asistido a la conferencia anual del Foro Económico Mundial en Davos, Suiza -donde la llamada elite global se congrega para discutir los problemas del mundo- desde 1995. Nunca salí tan desanimado como este año.
El mundo está plagado de problemas prácticamente insolubles. La desigualdad está en aumento, especialmente en las economías avanzadas. La revolución digital, a pesar de su potencial, también conlleva serios riesgos para la privacidad, la seguridad, los empleos y la democracia -desafíos que están agravados por el creciente poder monopólico de unos pocos gigantes de datos norteamericanos y chinos, entre ellos Facebook y Google-. El cambio climático representa una amenaza existencial para toda la economía global tal como la conocemos.