Las generaciones menores de 45 se encuentran en un descampado tal, que no hay nada que llevarse a la boca, por eso el ofrecimiento que se les haga tendría que ser una noticia primera, sin ningún tipo de supuestos ni de creencias, porque en las nuevas sociedades de movimiento constante es imposible creer. Habría que ofrecerles una noticia que sea un dato verificable con una verificación axiológica, no científica.
Una noticia en la que no resuene nada religioso ni antirreligioso.
¿Cuál sería ese dato limpio y verificable?
La necesidad ineludible del cultivo de la cualidad humana y de la cualidad humana profunda en nuestras sociedades, como una indagación libre en comunicación y en servicio.
Este Encuentro se propuso abordar una cuestión grave y urgente: la gestión de la potencia de las ciencias y tecnologías en continuo y rápido crecimiento por su retroalimentación mutua, y la gestión de las transformaciones constantes de las formas de vida de individuos y colectivos provocadas por la continua innovación de productos y servicios, requiere, con urgencia, encontrar maneras adecuadas para cultivar la cualidad humana y la cualidad humana profunda.
Sólo desde esa cualidad podrá gobernarse convenientemente la marcha de las sociedades en tránsito y de las sociedades de innovación y cambio constante. De esa cualidad humana depende la supervivencia de nuestra especie, de la vida y de la habitabilidad del planeta.