EL HAIKU. EXCLAMACIÓN DONDE EL ASOMBRO SE HACE POESÍA
Una de las formas más populares de la poesía lírica japonesa es el haiku, una composición de tres versos de cinco, siete y cinco sílabas, donde una imagen visual se contrasta con otra, sin comentarios, o donde a una imagen le sigue una reflexión concisa y huidiza al tiempo. Su proceso creativo es de total despojo para llegar a lo esencial, al decir simple, como vía de acceso al ámbito espiritual de la naturaleza. Un auténtico vaciamiento subjetivo para recrear una imagen verdadera. Un dejar opiniones, teorías y conceptos de lo que es la realidad para captarla en su esencia. Simples instantáneas de la realidad, de las que ofrecemos algunos ejemplos a continuación. Sobre la gran campana Se detiene una mariposa Y duerme. (Yosa Buson) Una flor caída Regresa volando a su rama ¡Una mariposa! (Moritake) Mirar, admirar Hojas verdes, hojas nacientes Entre la luz solar. (Matsuo Basho) Sobre la…
Juan Ramón Jiménez
La languidez del amor hace hablar un lenguaje Que sube hasta los labios yo no sé de qué fondo; Son cómplices el agua, la primavera, el pájaro, La luna, el largo adiós del ocaso de oro… No lo hemos aprendido, ni lo han aprendido Las mujeres que van del brazo de nosotros…: Es cual la misma voz en diferentes bocas… Igual que esos perfumes que retornan de pronto… Pasa el instante, y las palabras se ocultan Como en bolsas de niebla de secretos tesoros; Y si las recordamos a las que las dijeron, Nos miran, extrañadas, con los ojos atónitos… Juan Ramón Jiménez, LaberintoSelección Pepa Torras Virgili
José Ángel Valente
La rosa necesaria La rosa no; La rosa sólo Para ser entregada. La rosa que se aísla En una mano, no; La rosa Connatural al aire Que es de todos. La rosa no, Ni la palabra sola. La rosa que se da De mano en mano, Que es necesario dar, La rosa necesaria. La compartida así, La convivida, La que no debe ser Salvada de la muerte, La que debe morir Para ser nuestra, Para ser cierta. Plaza, Estancia, casa Del hombre, Palabra natural, Habitada y usada Como el aire del mundo José Ángel Valente, A modo de esperanza, Obras completas, Galaxia Gutenberg Como un relámpago Como un relámpago estallaba A nuestros pies La vida, A nuestros ojos, a Nuestras cabezas. Cuántas veces con pena, con amor, Con deseo, furiosamente Siempre, pronunciáramos: vida. Ahora no sabíamos De qué lado inclinarnos Para oírla mejor, Para ceñirla con más vida, Porque a…
Edmond Jabès
Muy pronto me encontré ante lo incomprensible, lo Impensable, la muerte. Desde ese instante supe que nada, aquí abajo, era Compartible, porque nada nos pertenece... Hay en nosotros una palabra más fuerte que todas Las demás –más personal también. Palabra de soledad y de certeza, tan sumergida en su Noche que apenas a sí misma se hace audible. Palabra del rechazo pero, igualmente, del compromiso Absoluto, que forja vínculos de silencio en el silencio Abisal del vínculo. Esa palabra no se comparte. Se inmola. Edmond Jabès, Cuaderno de versiones de José Ángel ValenteSelección Pepa Torras Virgili
La contemplación viva -Claudio Rodríguez-
Estos ojos seguros, Ojos nunca traidores, Esta mirada provechosa que hace Pura la vida, aquí en febrero Con misteriosa cercanía. Pasa Esta mujer, y se me encara, y yo tengo el secreto, No el placer, de su vida, A través de la más Arriesgada y entera Aventura: la contemplación viva. Y veo su mirada Que transfigura; y no sé, no sabe ella, Y la ignorancia es nuestro apetito. Bien veo que es morena, Baja, floja de carnes, Pero ahora no da tiempo A fijar el color, la dimensión, Ni siguiera la edad de la mirada, Más sí la intensidad de este momento. Y la fertilidad de lo que huye Y lo que me destruye: Este pasar, este mirar En esta calle de Ávila con luz de mediodía Entre gris y cobriza, Hace crecer mi libertad, mi rebeldía, Mi gratitud. Claudio Rodríguez, Don de ebriedad y otros poemas. Marenostrum, 2005Selección Pepa…