Raíces del diálogo interreligioso y misticismo.
Mariano Corbí El diálogo entre tradiciones que parte de las creencias y las llamadas ortodoxias, tiene severas limitaciones. Entendemos por CREENCIA la adhesión incondicional y absoluta a formas y formulaciones. El diálogo debe partir de lo que S. Juan de la Cruz llama el “toque” del Absoluto que engendra apertura interior, entrega, confianza, a eso se llama fe. Quien cree poseer la verdad cree que todos deben venir a ella y sólo puede alimentar esa idea si posee la verdad en formas y fórmulas. Ese o no tiene interés real en el diálogo, o su interés es superficial, puesto que piensa ¿que le van a ofrecer las otras tradiciones que él no tenga ya? Quien cree residir en la verdad usa el diálogo interreligioso de manera táctica como el mejor camino de traer a las demás tradiciones a la perfección de la propia verdad o como pura tolerancia en busca…