Etty Hillesum Aceptación puede sonar a pasividad, puede confundirse con la aprobación indiferente, con la resignación. El testimonio de Etty Hillesum, escribiendo desde los campos de concentración, es un ejemplo esclarecedor del sentido de una aceptación plena que es implicación y acción, pero desde la comprensión, desde una acogida radical de la realidad, se muestre como se muestre.
La auténtica cualidad humana no es buscar la salvación.
Quien busca salvarse no ha comprendido con claridad lo que es el camino al conocimiento silencioso, lo que es el camino espiritual.
Quien obedece para salvarse; quien se sacrifica para salvarse no está dispuesto a morir a sí mismo, a desaparecer por completo para poder conocer “al que es”, al Único.
Quien busca salvarse huye de las ruinas completas. No comprende que sólo hay salvación cuando no hay nadie a quien salvar.
Mientras se busque la salvación se permanece en la dualidad. Cuando se ha comprendido que no hay nadie a quien salvar, se sale de la dualidad.