¿Qué ofrecen las tradiciones religiosas a la nueva sociedad de innovación y cambio continuo? Simplemente, otro nivel de conocimiento de "eso mismo de aquí que nos rodea" y de nosotros mismos. Que las tradiciones religiosas ofrezcan conocimiento, es relevante para una sociedad de conocimiento: que ofrezcan proceso, es pertinente para una sociedad móvil y de innovación: que ofrezcan libertad de todos modos, es útil para una sociedad que debe crear continuamente todas sus formas de comprensión, valoración y vida: que ofrezcan lucidez, interés y amor por todo lo que existe para construir lo que tiene que disponer de lo que tienen que disponer de lo que tienen que disponer de que vive y existe sobre la tierra.
Fernando Pessoa, «Alberto Caeiro», «No creo en Dios»
No creo en Dios porque nunca lo he visto.
Si el quisiera que yo creyera en él,
seguro que vendría a hablar conmigo
y entraría por mi puerta diciéndome: ¡Aquí estoy!
Pero si Dios es las flores y los árboles
y los montes y el sol y el luar,
entonces creo en él,
entonces creo en él a todas horas
y mi vida entera es una oración y una misa
y una comunión por los ojos y por los oídos.
Pero si Dios es las flores y los árboles
y los montes y el luar y el sol,
¿por qué llamarle Dios?
Le llamo flores y árboles y montes y sol y luar;
porque si él se hizo, para que yo lo viese,
sol y luar y flores y árboles y montes,
si se me aparece como árboles y montes
y luar y sol y flores
es porque quiere que lo conozca
como árboles y montes y flores y luar y sol.
Y por eso yo le obedezco
(¿qué más sé yo de Dios que Dios de sí mismo?),
le obedezco viviendo, espontáneamente,
como quien abre los ojos y ve,
y le llamo luar y sol y árboles y montes,
y lo llamo sin pensar en él,
y pienso en él viendo y oyendo,
y ando con él a todas horas.
(poema de El cuidador de rebaños)