Francesc Torradeflot En nuestro marco de supervivencia, que es la Sociedad de Conocimiento (SC), basada en la ciencia y tecnología en cambio y generación continua de nuevos productos y servicios, no es viable el cultivo de la cualidad y sutilidad humana desde ningún tipo de sumisión a creencias, poderes o supuestos. En la historia del cultivo de la cualidad humana y de su formulación (en la historia de la por muchos llamada “espiritualidad”), a menudo nos encontramos con el uso del término Dios, en la mayoría de los casos bajo figuraciones o formulaciones teístas del mismo. Este término puede ser usado de manera simbólica, en cuyo caso no queda fijado por ninguna creencia y puede expresar la experiencia de la dimensión absoluta de la realidad sin fijarla, o ser interpretado de manera mítica, reflejando así la creencia de que detrás del término hay una realidad fija y descriptible.