Marià Corbí Hace décadas que aprendí a volverme a las cosas, y desde entonces lo he estado practicando con toda la intensidad que he sabido. Pero lo que he planteado en los últimos apartados, de alguna manera, es un paso más en mi concepción de lo que es el camino espiritual, no solo para mí si no para los miembros de las sociedades de conocimiento y para las sociedades en tránsito. Lo que creo que es novedad es que he comprendido que estos tipos de sociedades tienen las cosas más claras, nítidas y sencillas de lo que había imaginado. Las nuevas sociedades que, o no pueden creer o tienen dificultades para mantener las creencias, bastará que adopten una actitud parecida a la de los artistas. Los artistas no necesitan hacer divina a la belleza, ni enviarla a los cielos, se vuelven solo, con todo el corazón y la mente, a las cosas, para poder captar su belleza multiforme e inacabable para sentirse conmovidos y necesitados de decir el milagro, la maravilla y el misterio que vieron en las humildes cosas de nuestro mundo, modelado por nuestra necesidad en cada tipo de cultura. Y lo que con sus creaciones son capaces de decir vale para todas las culturas y para todos los pueblos y toda la historia humana, si los humanos tienen la sensibilidad suficientemente educada.
Intento de caracterización de la Cualidad Humana Profunda (espiritualidad) en las Sociedades de Conocimiento.
Preámbulo
Se trata de transitar
-desde una espiritualidad religiosa, fundamentada en creencias y en la sumisión, interpretada desde la epistemología mítica, y construida sobre el individuo,
-a una cualidad humana profunda libre y creativa que tiene que excluir toda creencia y sumisión, y que es interpretada simbólicamente sin epistemología mítica, y realizada desde equipos interdependientes.
Rasgos de la cualidad humana profunda en las sociedades de conocimiento
No se parte de creencias de ningún tipo, sino de un DATO que consiste en reconocer la doble dimensión de la realidad y, a través de ese dato reconocer la dimensión absoluta, también como DATO, en toda realidad y en sí mismo.
Para llegar al reconocimiento claro de estos datos, puede ser una ayuda eficaz la música, la poesía y las bellas artes en general.
Partiendo de ese reconocimiento, estudiar a fondo, y de por vida, a todas aquellas personasque desde el pasado y en el presente fueron capaces de ese reconocimiento (sagradas escrituras y grandes textos espirituales), para poder verificar, mejorar y profundizar en el reconocimiento de la dimensión absoluta.
Ese trabajo nos llevará a asentar en el “sin forma” todos nuestros pensamientos, sentires y actuaciones. Eso será la cualidad humana profunda.
Así todo egoísmo será excluido y sustituido por el amor y el servicio de todos a todos.
Todo este trabajo no se hará en solitario, sino en equipos de interdependencia.
En qué consiste el equipo en interdependencia, en el reconocimiento y cultivo de la cualidad humana profunda y de la dimensión absoluta en las sociedades de conocimiento:
Cada miembro del equipo recibe y da ayuda para reconocer la doble dimensión de lo real, y desde ella la dimensión absoluta.
Se estudian los grandes textos en equipo. Cada persona ayuda a las demás con sus indagaciones.
Todas ayudan a todas a asentarse en la DA, en lo informe, en el misterio de los mundos.
Todas evitan el egoísmo para amarse, servirse unas a otras y a toda criatura.
La tarea es obvia y simple.