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Luis Cernuda. He venido para ver
He venido para ver semblantes Amables como viejas escobas, He venido para ver las sombras Que desde lejos me sonríen. He venido para ver los muros En el suelo o en pie indistintamente He venido para ver las cosas, Las cosas soñolientas por aquí. He venido para ver los mares Dormidos en cestillo italiano, He venido para ver las puertas, El trabajo, los tejados, las virtudes De color amarillo ya caduco. He venido para ver la muerte Y su graciosa…
Tot allò que s’afirma pel que fa a Jesús és simbòlic
Totes les afirmacions referents a Jesús són una construcció simbòlica filla d'una inculturació en una civilització agrari/autoritària, hel·lènica i romana. El que és difícil no és acceptar la veritat d'aquesta afirmació teòrica; el que és difícil és viure tot el que es refereix a Jesús i a la religió cristiana des d'aquest pensament quan es converteix en un sentir real i quotidià. Les conseqüències, llavors, per a les organitzacions religioses, per a les pregàries i els rituals col·lectius són greus…
CASA DE MISERICÒRDIA
Joan Margarit Petita selecció de poemes d'aquesta obra (publicada a Visor Libros, 2007, i que ha merescut el Premi Nacional de Poesia 2008), acompanyada d'unes breus notes que ens va enviar Amando Robles, des de Costa Rica. Explica Joan Margarit, a l'Epíleg de l'obra: "Les Cases de Misericòrdia varen ser institucions molt severes (...) Em venien al cap les sol•licituds de les mares, i la conclusió era clara: la intempèrie devia ser molt més espantosa. Per això s'esmerçaven per…
José Angel Valente, No amanece el cantor
No dejéis morir a los viejos profetas pues alzaron su voz contra la usura que ciega nuestros ojos con óxidos oscuros, la voz que viene del desierto, el animal oscuro que sale de las aguas para fundar un reino de inocencia, la ira que despliega el mundo en alas, el pájaro abrasado de los apocalipsis, las antiguas palabras, las ciudades perdidas, el despertar del sol como dádiva cierta en la mano del hombre. José Angel Valente, No amanece el cantor,…
Yannis Ritsos. Sueño de un mediodía de verano
En otro tiempo hacíamos nuestras tareas, rezábamos Nuestras plegarias y repetíamos que dos más dos son Cuatro. Ahora, dos flores más dos rayos de luz no son Cuatro –son nuestra alma. Y una rosa más una mariposa no son dos –son Un Dios. Y un Dios es todo. ¿Cuántos son entonces nuestra alma más el alma de Dios? El maestro no sabe. Nosotros sí sabemos cuántos son: uno Lo leímos hoy en el libro abierto del sol; hoy, que Olvidamos…