J.Amando Robles Ya va para siete años que escribí Hombre y mujer de conocimiento, un pequeño libro que gustó bastante, planteando la espiritualidad laica, no religiosa, que personalmente creí encontrar en las famosas “enseñanzas” de don Juan Matus y Carlos Castaneda. Fue entonces cuando una amiga, secundada de inmediato por varios compañeros de trabajo, me propuso hacer algo parecido con la espiritualidad del Maestro Eckhart. La idea me pareció tan buena que inmediatamente acepté. Sin duda que mi amiga lo hacía pensando en la calidad de la espiritualidad eckhartiana, que ambos ya conocíamos y que por su riqueza bien merece ser puesta al alcance de los hombres y mujeres de hoy. Pero yo lo acepté sobre todo por la convicción profunda que ya entonces tenía de que la espiritualidad del Maestro Eckhart es también, en el fondo, una espiritualidad laica y como tal muy apropiada para los hombres y mujeres de hoy, que rehúyen, y con razón, lo religioso como mítico. ¿De hecho no es así como lo vienen leyendo estudiosos hinduistas y budistas? Y lo leen bien. Una espiritualidad laica y, como tal, muy adecuada para la sociedad y cultura de conocimiento que estamos construyendo. Y este es el propósito del presente libro, también introductorio y pequeño: mostrar al lector que la espiritualidad del Maestro Eckhart, de por sí ya famosa por su gran calidad, en el fondo es una espiritualidad laica, ponerla en valor como una espiritualidad muy pertinente para hoy aunque en su forma y contenidos sea tan religiosa, e inducir al lector a la lectura personal de los sermones y pequeños tratados del Maestro.
Del Talmud
Els Talmuds recullen les reflexions de diverses generacions de rabbins guiats sempre per un únic objectiu : com fer més transparent la vida quotidiana a la Presència divina, com impregnar el dia a dia d’un esperit de recerca del Rostre. Entre les figures entranyables que trobem en els Talmuds, destaca la de rabbi Hillel, mestre del s.I a.C. Els seus consells es caracterizen per facilitar al màxim els camins, posant sempre l’amor per davant de qualsevol altra consideració.
Rabbi Hillel deia -per exemple- estima la pau i busca-la sempre ; estima les criatures i acosta-les a la Torah. O, també : qui no augmenta els seus coneixements, els destrueix. No diguis : quan estigui lliure estudiaré perquè, potser, no estaràs mai lliure. Qui utilitza el seu poder en favor de sí mateix, perirà. No judiquis mai al pròxim fins que tu no et trobis en la seva mateixa situació.
Un dia un pagà es va presentar davant rabbí Hillel i li va dir : “fes-me prosèlit, però et poso com a condició que m’ensenyis tota la Torah en l’estona que m’estaré dret sobre un peu”. Hillel se’l va mirar i li va respondre : no facis als altres allò que no vulguis per a tú. Això és la Toràh i la resta només són comentaris. Ves i estudia.
This Post Has 0 Comments